Aprende a concentrarte con estos 8 trucos

Aprender a concentrarse puede resultar una tarea difícil y por eso nosotros te mostramos 8 trucos muy sencillos, y que puedes poner en práctica desde el primer día, que te ayudarán en este propósito. ¡Descúbrelos!
WhatsApp
Facebook
Twitter
LinkedIn
Email

Aprender a concentrarse es posible con el entrenamiento diario. Según la RAE, la concentración implica centrar la atención intensamente en algo y, para conseguir buenos resultados en la realización de cualquier actividad, se requiere de dicha concentración.

Como dijo Alexander Graham Bell: “Concentra todos tus pensamientos en el trabajo que estás haciendo. Los rayos de sol no queman hasta que se concentran en un punto”.

¿Se puede entrenar la mente para que resulte más fácil concentrarse?

A veces, nos puede parecer difícil centrar nuestra atención en la tarea que estamos realizando. Esto se debe, principalmente, al ruido mental incesante al que estamos sometidos a lo largo del día. Los pensamientos desenfrenados nos impiden focalizar nuestra atención y nos distraen de lo que tenemos en el Ahora. En muchas ocasiones, además, estos pensamientos son boicoteadores y nos quitan mucha energía. Es por esto que es importante entrenar la mente.

¿Sabías que el cerebro es el órgano que más energía consume del organismo? Aprovecha todo el potencial que tienes para alcanzar tus objetivos enfocándote en lo realmente importante en este momento.

Ejercicios y trucos para concentrarse

Truco 1: No juzgues

En el momento en el que adviertas que tu atención se ha desenfocado de la tarea que estas realizando, simplemente vuelve a enfocarla, sin juzgarte ni culparte, porque estos serán pensamientos inútiles que te malgastan tu energía.

Truco 2: De uno en uno…

Cuando tenemos la mente en muchas cosas a la vez, en realidad lo que hacemos es cambiar el foco de atención constantemente. Esto impide una profundización completa en la tarea y conlleva una pérdida de tiempo.

Truco 3: Evita distracciones

Cómo aprender a concentrarse depende de ti. Para entrenar la concentración, ten en cuenta que deberás prevenir distracciones. Evita utilizar música o cualquier otro estímulo que divida tu atención. Puedes usar melodías especiales para concentrarte, como música instrumental o sonidos de la naturaleza. Si ya conoces la música será mucho mejor, eso evitará que te distraigas y pongas tu atención plena en la tarea que tengas en tus manos.

Truco 4: Entrena tu mente con técnicas de Meditación y Mindfulness

Si quieres aprender realmente a concentrarte, las técnicas de mindfulness y la meditación te ayudarán a entrenar la mente para mantener el foco. La atención plena aporta muchos beneficios y lo mejor es que podemos practicarla en cualquier momento del día. Puedes ducharte apreciando las sensaciones del cuerpo, el tacto del agua, el olor al jabón y los detalles que más te gusten. También puedes entrenar mindfulness lavándote los dientes, prestando atención plena a los movimientos de tu mano o a las sensaciones en tus dientes y las encías. Hay muchas pequeñas tareas que hacemos de manera automática, aprovecha cada oportunidad que te ofrecen los pequeños detalles de la vida para disfrutar del momento presente, conectándote con lo esencial, contigo mismo y saboreando cada minuto.

Truco 5: Toma nota

Si te suena la frase “no puedo concentrarme para estudiar”, este truco es perfecto para ti. Para aprender a concentrarse para estudiar deberás tomar notas. Escribir a mano nos ayuda a centrarnos activamente en el trabajo que estamos llevando a cabo. Al tratarse de una labor manual, tu mente se conectará de una forma más fácil. Mantén tu bolígrafo o lápiz en movimiento, eso evitará que te distraigas con otros pensamientos y centres tu foco de atención en lo que estás estudiando o memorizando.

Otro truco es hablar en voz alta mientras estudias. Se ha demostrado que esta técnica ayuda a interiorizar lo que se está leyendo y las ideas con las que se están trabajando. El hecho de verbalizar te ayuda a materializar e integrar el conocimiento mediante las palabras. Así se activa un proceso de dos pasos que te ayudan a recordar con más facilidad y a concentrarte en el estudio.

Truco 6: Crea un horario de trabajo y prioriza

Existen muchas maneras de concentrarse, pero esta forma es muy eficaz. Busca tu mejor horario para trabajar. Hay personas que son más eficientes según la hora del día, así que elige tu horario atendiendo a tus ritmos biológicos, identificando tus momentos más tranquilos y los más activos. Escúchate y crea un horario con el que te sientas cómodo, de esta forma rendirás más y aumentará tu productividad de manera significativa.

Si creas un plan personal diario, te ayudará a desarrollar la concentración. Además, ten en cuenta la importancia de incluir descansos programados para desconectar del trabajo y retomar fuerzas con alimentos apropiados para recuperar energía.

De esta forma, tendrás organizadas tus tareas. Muchas veces perdemos más tiempo por no contar con una correcta planificación de nuestras actividades. Si dedicas unos minutos a priorizar tus tareas y planificar el día, sabrás qué labor te toca realizar en cada momento y podrás enfocarte en cada una de ellas con atención plena y máxima concentración.

Truco 7: Procura programar descansos regularmente

Con un horario por escrito te esforzarás mucho más por cumplirlo, así ganarás tiempo y productividad. Además, conseguirás trabajar de una manera más relajada y sin estresarte.
Para los días largos y con mayor carga de trabajo recomendamos prestar atención plena a la actividad que estés realizando durante 50 minutos y tomarte 10 minutos de descanso a continuación del esfuerzo. Aprovecha este tiempo para hacer algo que te relaje y te ayude a desconectar. Puedes realizar alguna técnica de relajación o de mindfulness, levantarte del escritorio y tomarte una taza de té o lo que necesites para descansar y retomar energías para continuar trabajando con plena concentración.

Truco 8: Motivación, trabaja la concentración en tus objetivos

Para alcanzar la concentración y trabajar activamente en tus objetivos a corto y largo plazo, necesitarás un motivo que te de fuerzas en momentos de debilidad. Si siempre tienes en cuenta el por qué y para qué lo haces, te ayudará a recordarte el objetivo general que deseas alcanzar.
Si evocas tus objetivos a largo plazo y te visualizas consiguiendo tu meta, te dará mucha energía para centrar tu foco de atención y desarrollar así tu capacidad de concentración.

Ahora que ya conoces algunas técnicas y ejercicios para aprender a concentrarse, tendrás que experimentarlas.

Recuerda que siempre puedes usar tu respiración para volver al momento presente y concentrarte con plena conciencia a la actividad que estés realizando en ese momento. Además, practicando la meditación diaria, desarrollarás de manera natural tu capacidad de concentración y de enfocar tu atención, ayudándote a mejorar tu bienestar y calidad de vida.

Compartir
WhatsApp
Facebook
Twitter
LinkedIn
Email
Descubre más

Artículos de interés