En las últimas décadas, debido al frenético ritmo que marcan la sociedad actual, el estrés se ha instaurado y aceptado en nuestras vidas como algo aparentemente natural. En algunos entornos, equivocadamente, el estrés se ha podido percibir incluso como un signo de mayor productividad. Pero la realidad es muy diferente. Y cada vez son más las personas, sobretodo altos directivos y emprendedores, que lo han entendido y han aprendido cómo combatir el estrés. Son personas que, habiendo tomado consciencia de las consecuencias negativas del estrés, no sólo en su bienestar sino también en su productividad, han optado por otro estilo de vida completamente diferente, basado en vivir el presente, obteniendo maravillosos resultados en su rendimiento diario y calidad de vida.
¿Qué es el estrés?
El estrés es un proceso que se activa en el organismo al percibir una situación o acontecimiento que nuestro cerebro interpreta como amenazante, o desbordante para nuestros recursos. Esta respuesta del organismo se conoce como mecanismo de “lucha-huiída”. En ocasiones, puede venir desencadenado incluso por los propios pensamientos, sin necesidad de que la situación “estresante” realmente ocurra. Este mecanismo de lucha-huída desencadena una serie de efectos a nivel fisiológico, cognitivo, emocional y conductual, para reaccionar ante la amenaza percibida.
La excelente noticia es que controlar el estrés es posible, y está en tu mano. Muchas personas ya lo han conseguido y, por supuesto, tú también puedes lograrlo. Te contamos cómo combatir el estrés a través de dos pasos fundamentales:
Paso 1: reconocerlo. Cómo saber si tienes estrés
El primer paso es tomar consciencia. Para ello, es esencial reconocer los síntomas del estrés, es decir, aquellos cambios que el mecanismo de “lucha-huida” produce en nuestro organismo, que podemos clasificar en tres niveles:
- Efectos Fisiológicos: aumento del ritmo cardíaco y la presión arterial, respiración agitada, tensión muscular, exceso de sudoración, cansancio o fatiga, problemas digestivos y mareos.
- Efectos Cognitivos: dificultad para concentrarse, falta de atención (y, por tanto, problemas de memoria), aparición de pensamientos compulsivos, reducción de las habilidades sociales.
- Efectos a nivel emocional: ansiedad, irritabilidad, vulnerabilidad, sensación de frustración, temor social, inseguridad.
- Efectos conductuales: comportamientos compulsivos, problemas de insomnio, tendencia al aislamiento social.
Estos son sólo una muestra de la larga lista de respuestas en nuestro organismo o efectos derivados del estrés que, sin duda, conducen a un deterioro de la salud y la calidad de vida de quien lo padece.
Paso 2: actúa. Cómo combatir el estrés
Simplemente, incorporando pequeños cambios en tu vida obtendrás grandes resultados para combatir el estrés, mejorando notablemente tu salud y calidad de vida. Algunos consejos sobre cómo quitar el estrés son:
1. Realiza técnicas de relajación y respiración
Controlando la respiración, notarás una reducción inmediata de muchos de los principales síntomas del estrés. Descubre cómo aplicarlo en nuestro artículo sobre cómo recuperar la calma en unos instantes.
2. Medita
La práctica regular de la meditación calma la mente agitada, transformando la percepción de cada situación de tu vida. Puedes seguir leyendo sobre los beneficios de la meditación en este enlace.
3. Descansa
El descanso es vital. No intentes dormir menos para hacer más, porque justamente obtendrás el resultado contrario al deseado. Puedes ver más sobre cómo obtener un sueño reparador en este enlace.
4. Disfruta del momento presente
Desactiva el piloto automático y comienza a practicar y disfrutar la atención plena, tu capacidad para estar en el Ahora. Descubre cómo disfrutar del momento presente en este artículo.