La inteligencia intrapersonal es la predisposición valiente y abierta a conocernos a nosotros mismos; es un mirar adentro para descubrir lo que realmente es importante y digno de ser buscado y hallado, trabajado y disfrutado. Es ir más allá de lo que se supone debemos ser, para encontrar el sentido de Ser. Es autenticidad y honestidad, valores sin los cuáles se construye sobre arenas movedizas. Es la capacidad de asumir la responsabilidad de nuestra vida, sin excepciones. ¿Se puede entender el Éxito, así, en mayúscula, sobre alguna otra base?
Por alguna razón que desconozco, el ser humano sólo observa lo que parece suceder fuera de si mismo, como si en esa dirección estuvieran las preguntas y las respuestas a lo que realmente le importa, incluido el sentido, propósito y significado de su propia vida.
Es un hecho científicamente demostrado que todo lo que parece suceder fuera no Es como lo vemos, sino sólo una interpretación interna, cortesía de nuestro maravilloso cerebro. Sin embargo, pretendemos desenvolvernos en la vida excluyendo al Intérprete.
Afirmamos que “esto es un fracaso”, “aquello me hace sentir bien”, “lo de más allá es un problema”… No nos damos cuenta de que esto, aquello o lo de más allá no es Nada sin tu interpretación. La realidad es que “interpreto esto como un fracaso”, “permito que aquello me haga sentir bien”, “considero lo de más allá como un problema”. Con independencia de la situación, eres tú quién la interpreta, permite y considera, por lo que la respuesta al éxito o fracaso, el bienestar y los problemas, no se pueden hallar en el hecho en sí.
No nos engañemos, no existen las “realidades”, sólo interpretaciones compartidas, y no por todos. Es importante darnos cuenta de esto.
¿Qué consideran los demás un fracaso? ¿Qué es lo que se espera de mi? ¿Por qué no me han tenido en cuenta? … Son preguntas cuya respuesta sólo está en la interpretación de otro, y sobre lo que no podemos decidir. El reto está en darnos cuenta de que tampoco es necesario.
¿Qué significa para mí?, ¿Cómo me siento?, ¿Qué es lo que realmente quiero?, ¿Cómo puedo interpretar este suceso para avanzar?,… Son preguntas inteligentes que aportan verdadero sentido y transforman los hechos.
La inteligencia intrapersonal se cultiva, y sus frutos son la inspiración, intuición, claridad mental, creatividad, serenidad, confianza y propósito.
Estas cualidades están en ti, y se van expresando de manera natural mediante el autodescubrimiento.
Regálate tiempo. Haz hueco en tu agenda para encontrarte contigo mismo.
Espacios de silencio, a través de la Meditación, para apartarte de los estímulos externos, escucharte y conocerte, para darte cuenta de que dentro de ti hay un Universo tan vasto como el que ves fuera.
Espacios de reflexión y planificación, enfocados en los propósitos significativos que surgen del autoconocimiento.
Mindfulness en tu vida diaria, para frenar el “piloto automático” y mantener el sentido de dirección, mientras disfrutas de todo aquello que ya forma parte de tu vida en este momento, en el eterno Ahora.
Liderar nuestra propia vida, asumiendo la responsabilidad sin excepciones, nos hace libres y nos otorga verdadero poder. Y es un requisito fundamental si queremos Inspirar y Liderar a otros, así, en mayúsculas.