Hoy me mandaron un mensaje por whatsapp con este texto: «No, no estamos en el mismo barco… estamos en el mismo mar: unos en yate, otros en lancha, algunos en salvavidas y muchos nadando con todas sus fuerzas…»
Y me he sentido identificada. Incluso en diferentes momentos de la vida, yo misma he ido en barco, en yate, en lancha, en salvavidas y a veces nadando con todas mis fuerzas… Como cada uno de nosotros…
No siempre las circunstancias son similares y tampoco, en algunas parecidas, nos sentimos y respondemos de la misma manera. No.
Por eso, muchas veces al juzgar al otro o a nosotros mismos en su respuesta a tal o cual situación, estamos siendo injustos… Porque cada momento es diferente y no tenemos ni los mismos aprendizajes, ni las mismas experiencias para afrontar situaciones semejantes.
Vamos creciendo, vamos aprendiendo, vamos cambiando…
Lo que sí es cierto es que, si estamos en el mismo mar y vamos en yate, quizá podamos dar la mano a uno de los que van nadando para hacerle más sencillo el recorrido…
Y tú ¿Cómo estás llevando la travesía en este momento?